04 julio, 2009

Relación entre magia y matemática: El encanto de los números


¿Alguna vez imaginó que existiera una relación entre la magia y la matemática? Muchos podrían pensar que no, pero lo cierto es que sí existe un vínculo entre ambas actividades. El mismo David Copperfield, uno de los ilusionistas más conocidos en todo el mundo, utiliza esta ciencia en varias de sus presentaciones.

Esta relación mágico-matemática viene de muchos años atrás y es de gran ayuda para la enseñanza de esta ciencia, porque logra de inmediato captar el interés de los alumnos, según explica el matemático y mago peruano David Palomino Alva de la Unidad de Medición de la Calidad (UMC) del Ministerio de Educación.

"Cuando le presentas un truco a un niño se activan en él capacidades de razonamiento que lo harán investigar para entender mejor dicho artificio. Al hacer ese ejercicio mental el alumno aplicará ciertas habilidades matemáticas,utilizará el pensamiento lógico y el combinatorio así como su creatividad. Entonces, cada vez que se le presente un problema de la vida cotidiana, esa persona recurrirá a los mismos métodos que le permitieron resolver el truco aprendido", señala Palomino.

El matemático cuenta que cuando era profesor de secundaria en el colegio Primero de Mayo de San Miguel, a fines de los noventa, utilizaba la magia como un recurso para despertar el interés de sus alumnos. "A los chicos les gustaba mucho que utilizara trucos mágicos basados en la matemática y de paso prestaban más atención en las clases. Por ejemplo, uno podía enseñarle a los estudiantes el binomio al cuadrado planteándoles algunos trucos de cálculo mental", explica Palomino.

No todo es juego
Palomino con lentes negros juega con una baraja de cartas.

Sin embargo, David Palomino advierte que la parte lúdica no es suficiente para aprender matemática, sino que esta tiene que conectarse con el contenido pedagógico. "No estoy negando el uso de los libros, pero muchas veces la manera de presentar los contenidos hace que el alumno se aburra. Pero si él recibe una enseñanza de tipo lúdica, entonces verá a esta ciencia desde otra perspectiva, se le despertará el interés y entenderá que existen relaciones numéricas en un juego mágico y hará que su mente se adapte mejor al aprendizaje", refiere.

David Palomino reconoce que el uso pedagógico de los juegos mágicos no tiene mucha difusión en el Perú, algo que sí ocurre en países como Estados Unidos y España. Y aunque existe poco material disponible que relacione magia con matemática, él anima a los maestros a capacitarse en el uso de los trucos matemáticos.

Una relación que viene del pasado

Los trucos que utilizan leyes matemáticas existieron desde la antigüedad. Según el especialista Palomino los primeros libros que trataban este vínculo fueron escritos entre los años 1600 y 1700. Aunque no fue hasta 1933 cuando el mago y matemático norteamericano Royal Vale Heath escribió Mathemagic (Matemagia), un libro que reúne varios juegos, trucos y curiosidades que podían ser explicados matemáticamente.

Sin embargo, fue otro estadounidense, Martin Gardner, un filósofo, mago aficionado y considerado como el gran difusor de la matemática, quien en 1956 publicó el libro Mathematics, Magic and Mistery (Matemáticas, magia y misterio), obra que despertó la atención de muchos magos y amantes de los números interesados en esta relación.


El 'Dragón de Papel' es una sorprendente ilusión
óptica creada en homenaje a Martin Gardner.

"El libro de Gardner fue el punto de partida para que otros escriban más textos que relacionan las matemáticas con la magia. A raíz de esa publicación se ha trabajado mucho más en el campo de la matemática lúdica a través de obras de matemáticos como Ian Stewart, Jhon Horton Conway, Peter Diaconis, Colm Mulcahy, Werner Miller por citar a algunos", afirma el experto peruano.

Una nueva alternativa

Así, el especialista de la UMC refiere que esta manera de apreciar la matemática puede ayudar a que muchos alumnos le pierdan el miedo y puedan entenderla de una forma divertida.

"Gardner decía -precisa Palomino- que un pasatiempo matemático, un juego deestrategia o un truco mágico contribuye mucho más a difundir una mejor imagen de la matemática, que media docena de artículos mediocres. Puede sonar duro, pero en realidad en una clase aporta mucho más un juego de tipo mágico porque despierta el interés y la curiosidad de los chicos y los motiva a estudiar"

Artículo tomado integramente de http://www.eleducador.com